El dinero es importante en nuestra sociedad actual, es la base de nuestra economía y te da el poder de obtener casi cualquier cosa que desees. Dada su importancia, debes tener una relación saludable con el dinero y no temerle. Al final, es solo una herramienta que podría ayudarte a vivir tu vida más cómodamente. Esta es la historia de cómo comencé a ahorrar dinero después de darme cuenta de su importancia.
Cuando tenía 15 años, mis padres comenzaron a darme dinero mensualmente para salir con amigos o comprar ropa nueva. Como te puedes imaginar, este dinero no era suficiente para satisfacer mis deseos adolescentes, y me quedaba sin dinero en las primeras dos semanas del mes.
En ese momento estaba obsesionado con la tecnología y quería comprar una buena PC o un smartphone más nuevo. El problema era que aunque quería esas cosas, era incapaz de ahorrar dinero.
Un día me cansé de no tener dinero, así que hice lo que casi todos los adolescentes habrían hecho en esta situación: busqué en Google “cómo ahorrar dinero”. Después de unas horas viendo videos y leyendo sobre dinero, tuve una idea de cómo podría ahorrar algo de dinero.
Ahorrar dinero consiste en reducir gastos y abstenerse de tentaciones. Para lograrlo, lo primero que hice fue anotar cada gasto que hacía durante un mes. Una vez terminado el mes, comencé a notar dónde y cuándo se me iba el dinero. Después de este análisis, empecé a cuestionarme qué gastos eran necesarios y cuáles no. Este paso es todo cuestión de negociar contigo mismo y elegir solo los gastos más importantes. Por ejemplo, cenar fuera 3 veces por semana puede no ser esencial y podría reducirse a una vez por semana.
Con mis gastos analizados, presupuesté el dinero que iba a gastar cada mes. Por ejemplo, si tus padres te daban 100€ al mes, te comprometes a gastar solo 40€ y ahorrar los otros 60€.
Además, para ayudarme a ser constante con este presupuesto, decidí abrir otra cuenta bancaria para transferir el dinero que iba a gastar y controlar mejor mis gastos.
Resumiendo la estrategia, tienes que:
- Registrar todos tus gastos
- Analizar qué gastos son indispensables y cuáles no
- Presupuestar tus gastos para el mes
- (Opcionalmente) Transferir el dinero a otra cuenta bancaria destinada a gastos
- Ser disciplinado y mantenerte dentro del presupuesto
Gracias por leer, espero que empieces a ahorrar dinero y a gastarlo en cosas útiles.